El Jueves Santo 2012 ha sido agridulce en Linares. La parte más dulce corresponde a las hermandades del Prendimiento y el Rescate, que pudieron procesionar con normalidad durante gran parte de su recorrido, hasta que decidieron volver a sus respectivos templos cuando comenzó a lloviznar pasadas las diez de la noche. El trago más amargo lo saboreó la hermandad de La Columna, que decidió regresar a la iglesia de Santa María cuando apenas llevaba hora y media de recorrido.
Rescate 2012.
El Rescate iniciaba su estación de penitencia a las 16.45, ya que el Paso del Cristo fue trasladado hasta la puerta del edificio del Pósito, la antigua cárcel de Linares, para celebrar el acto de "liberación del preso", una tradición que se ha vuelto a poner en práctica por esta cofradía tras 45 años sin llevarse a cabo, gracias a un Real Decreto aprobado en el mes de marzo por el Consejo de Ministros mediante el cual se conceden indultos especiales en Semana Santa. El reo indultado por el Señor del Rescate, que cumplía condena en la Prisión Provincial de Jaén, acompañó al Cristo durante toda la estación de penitencia vestido con una túnica y el rostro tapado.
Prendimiento 2012.
La Hermandad de Jesús en su Prendimiento y Nuestra Señora del Rosario comenzaba su estación de penitencia a las cinco y cuarto de la tarde desde la parroquia de San Agustín. Con paso firme y elegante, los costaleros portaron ambos pasos por las calles de Linares bajo los sones de la Banda de Cornetas y Tambores del Rosario, que acompañó musicalmente al Cristo, y la Agrupación Musical Maestro Alfredo Martos, que hizo lo propio con la Virgen. Esta cofradía ofreció bellas imágenes al pasar por diversos puntos destacados como las calles Espartero, Ventanas, Rosario o la Plaza del Ayuntamiento, donde se celebró la ceremonia de la "Lectura de la Sentencia", el momento más emotivo y emblemático para esta cofradía. Tras ello, el Prendimiento emprendió el camino de vuelta a casa ante la amenaza de lluvia existente.
Columna 2012.
La cofradía más perjudicada por el tiempo en este Jueves Santo ha sido La Columna, que apenas realizó tres horas de recorrido. El motivo radica en la llovizna que empezó a caer sobre Linares pasadas las diez de la noche, cuando el Paso de Misterio se encontraba desfilando por la calle Pontón. Desde ese momento, y ante el riesgo de que las precipitaciones fueran a más, se decidió volver al Templo acortando el recorrido a través de las calles Rosario, Campanario y Carnecería. A pesar de que fue poco el recorrido realizado, destaca el buen hacer de los costaleros de ambos pasos y la seriedad con que desfiló todo el cortejo procesional, que mantuvo el orden y la calma a pesar de la vuelta anticipada. Conforme iban introduciéndose los dos pasos en la iglesia de Santa María se desataba la emoción y la rabia contenida entre los hermanos.
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